Al notar el clima frío que ya ha llegado a Guanajuato este otoño, Vivian Lohmeyer nos envió un par de sugerencias para transmitirlas a las personas con perros que pasan las noches al aire libre, como es el caso de muchos perros aquí. Ella recomienda regalarles un suéter viejo o comprarlo en un mercado local, donde se pueden comprar suéteres usados por unos pocos pesos. Los brazos del suéter se pueden acortar para que se ajusten a las patas delanteras del perro, y el cuerpo del suéter también se puede cortar y coser o pegar con cinta adhesiva para que se ajuste al perro alrededor de su barriga. El perro estará mucho más abrigado, especialmente durante las noches frías.
Si alguna vez has salido al aire libre descalzo durante una noche fría aquí, sabes lo miserable que debe ser para un perro tener que acurrucarse para pasar la noche en alguna acera. Lo más amable que puedes hacer es invitar a tu perro a entrar en casa por la noche. Si eso no es posible, lo mejor que puede hacer es proporcionarle una caseta para perros y una manta.
Arno Naumann, presidente de Amigos de Animales de San Miguel de Allende, construye casas para perros bien aisladas para sus perros rescatados utilizando el siguiente método y materiales. Hace una plataforma de ladrillos o cemento para que la casa del perro se levante del suelo. Luego, compra una casa de plástico lo suficientemente grande como para que el perro se pare y gire, pero no tan grande como para permitir que se escape el calor corporal del perro. Dentro de la perrera coloca un trozo de madera contrachapada cortada al tamaño del suelo de la perrera. Esto ayuda a aislar la perrera del frío cemento o plataforma de ladrillo.
Rodea la perrera con fardos de paja y cubre la paja con una malla metálica. Luego cubre la malla y la paja con una capa de cemento. Después de que el cemento se seca, lo cubre con una membrana de tela utilizada para sellar techos y lo pinta con pintura impermeable. Una vez pintada la caseta con pintura impermeable, se puede pintar de cualquier color. La casa para perros ahora está protegida no sólo del frío invierno, sino también del cálido sol primaveral y de las lluvias estivales.
Si no puedes permitirte una casa para perros hecha a medida como la de Arno o una hecha de plástico o madera, vete a tu supermercado local y compra una caja de cartón resistente lo suficientemente grande para que tu perro se sienta cómodo, cierra la parte superior con cinta adhesiva, corta una puerta al costado para que la use tu perro y coloca un periódico y una manta adentro. Colócalo en una zona resguardada del viento y ponle un peso para que no se mueva. Tu perro te lo agradecerá mucho.